Eric "Tano" Simonetti: “Hay que adecuar un sistema educativo para la pandemia” y pidió que en La Plata se duplique la cantidad de escuelas

El docente y delegado de SUTEBA, Eric "Tano" Simonetti, dio detalles de la marcha organizada por docentes, junto a la comunidad educativa, que se realizó este jueves último en la ciudad de La Plata. Simonetti afirmó que el reclamo fue fuerte, ya que la caravana realizada por primera vez al Ministerio de Salud de la provincia “fue de las más convocadas en situación de pandemia”.

También, el dirigente, en diálogo con "No es lo que parece" por FM 96.7  de La Plata.habló en torno a las nuevas restricciones que, entre ellas, es dejar de concurrir a las escuelas, asegurando que en el sistema educativo no están garantizadas las condiciones, incluso, antes de la pandemia, lo cual, la situación se ve empeorada.

Además, ante la problemática sobre las vacunas, el referente de la organización política Nuevo MAS, aseveró que “Argentina tiene una alta capacidad de vacunas porque tiene un sistema de salud y un entrenamiento de la práctica de vacunación muy avanzada”, por ello, enfatizó que es de gran urgencia la vacunación masiva al total de la población, señalando que“el problema ya no es más científico, sino que el problema se volvió político”.

- Para comenzar, contá ¿por qué la marcha docente hizo su recorrido desde la Dirección General de Cultura y Educación al Ministerio de Salud de la Provincia?

- En las últimas semanas, como es de público conocimiento, la cantidad de casos de coronavirus creció de una manera muy vertiginosa y en nuestra región en particular. En las escuelas, también creció mucho la preocupación porque en ellas hay un gran problema, y que es que la mayoría de los estudiantes y los docentes, vamos en colectivo. Como todo el mundo ve, los colectivos se han desbordado. Entre los colectivos y la realidad social desbordante de casos, hace que sea muy difícil que las escuelas sigan funcionando, es decir, hay compañeros contagiados, con lo que significa los aislamientos de las burbujas. Se hacía muy inviable que todo siga funcionando. Por eso, hicimos una asamblea virtual con más de 100 docentes, donde se resolvió reclamar por el cese de la presencialidad, al menos durante un tiempo, para poder sortear esta situación tan difícil, donde hay un colapso sanitario que ha generado un desborde total de los casos. Por consiguiente, se votó un paro de 48 horas, porque el gobierno había dicho que no iba a suspender las clases, después, a ese paro se sumaron otros gremios, y entre ayer y hoy, hubo un paro muy fuerte en La plata y en muchos distritos de la provincia de Buenos Aires, que coincidió con lo que después terminó resolviendo el gobierno nacional, que se suspendan durante 15 días las clases. 

- En principio, lo que ha hecho el gobierno nacional, desde el SUTEBA La plata, y desde tu idea política -que no es la misma que la de Baradel-, están de acuerdo.

- Sí. Baradel, que es quien dirige el SUTEBA en la provincia de Buenos Aires, no llamó a ningún paro para reclamar la suspensión de clases. Pero el paro igual fue muy fuerte, porque la mayoría de los docentes, les parecía insostenible esta situación. Eso fue algo que ayer decretó el gobierno, pero lo que no decretó es cómo vamos a hacer para garantizar la virtualidad. En el año pasado, la virtualidad fue prácticamente imposible de llevar acabo, cada docente y cada grupo de alumnos hicieron lo que pudo o supo. Fue muy difícil, porque los sectores de la media o la media alta, tiene las condiciones económicas, tiene pc e internet. En cambio, en la mayoría de los barrios de la clase trabajadora, no hay internet en las casa, a veces uno cree que es así, pero no es la realidad. Tampoco hay una computadora para cada miembro familiar, o para que un chico esté toda la mañana o la tarde con la computadora recibiendo clases virtuales, eso no existe. Por eso estamos pidiendo que se decrete la conectividad gratuita para los hogares donde hay docentes o donde hay estudiantes de todos los niveles educativos. Al mismo tiempo, reclamamos que se entreguen computadoras a cada uno de los estudiantes, cosas que se ha hecho en su momento. Ya pasó el año y no se hizo. Para garantizar que haya educación pública, me refiero a que el Estado garantice el acceso a la educación, que ofrezca las herramientas, tales como el espacio físico, los docentes y los materiales didácticos. Si la educación es en tu casa, te tiene que pagar el internet y computadoras, lo mínimo. Ni hablar de los estudiantes que no tienen condiciones ni en la casa o no tienen casa, recordemos que más del 50% de los menores de edad, son pobres, o sea que tienen condiciones de vida muy difíciles, y eso incluye una situación en sus casas casi imposible, que un pibe se conecte cuando en su casa viven un montón en el mismo lugar, los viejos no tienen laburo. O sea, uno como docente que tiene muchas escuelas, puede darse cuenta de estas diferencias sociales que genera la virtualidad. 

- ¿Y por qué al Ministerio de Salud bonaerense?

- Ese fue un reclamo muy fuerte. Y voy a agregar otra cosa que a nosotros nos parece que aún es más importante: hoy, la caravana de autos que hicimos, fue de gran participación, fue de las más convocadas en situación de pandemia, donde por primera vez hicimos una movilización al Ministerio de Salud, porque queríamos colocar el reclamo sanitario en el primer lugar y reclamarle a través del Ministerio de Salud de la provincia a todo el Estado nacional que tome una medida. Parece que el gobierno desconoce que se puede hacer, porque ni hablan de eso, que es que se empiece a vacunar a toda la población con las vacunas que se producen en Argentina, es decir, en Argentina producimos millones de vacunas pero que se van para otros lugares.

- ¿Cómo es eso?

- Recordemos cuando empezó la pandemia, que se descubrió la vacuna, acá se empezó a producir vacunas del empresario Sigman, que el Estado compró. Se dice que el Estado tiene 42 millones de dosis pagas, o sea, para 21 millones de personas, esa vacuna se iba a envasar en México, y después de México iba a volver para acá. Con esa vacuna, lo que sucede, es que se va a Inglaterra y a EEUU, fue toda una mentira y una estafa por parte de esta empresa de que la vacuna se garantice para la población. Lo que estoy diciendo parece una locura, pero es la realidad. Podría haberse utilizado esa vacuna para vacunar a toda la población de una manera muy rápida, con esta vacuna, Argentina hubiera liquidado este problema en dos meses, y no estoy exagerando, porque la capacidad que el país tiene de vacuna, es muy alta porque tiene un sistema de salud y un entrenamiento de la práctica de vacunación muy avanzada. Con esto me estoy refiriendo a la vacuna AstraZeneca.

- Exacto, el preparado se hace en la Argentina. Lo que no se sabía, es que si se seguía haciendo y seguía habiendo embarques del líquido, si era camino a México o camino a los EE.UU

- Sí. Es impresionante. De hecho, esta semana iban a llegar las primeras 900 mil dosis, y ahora se habla de que se suspendió esa producción. Lo que estamos planteando, ante una situación de emergencia mundial de la humanidad, es que se declare la patente de la vacuna como un bien público de la humanidad, como en su momento se hizo con la vacuna de la polio. Uno, como Estado, tiene que elegir entre el privilegios de la salud de la población o la ganancia empresaria, acá se definen las verdaderas cosas.

- ¿Puede decirse que este gobierno no garantiza ni privilegia nada?

- En algún momento se decía que la cuarentena, como medida sanitaria fue correcta, por lo menos para nosotros. Pero uno no puede vivir eternamente en cuarentena por una razón muy práctica: la cuarentena no combate la pandemia, solo la contiene. A la pandemia la vamos a derrotar cuando se vacune a toda la población, es decir, si no vamos a un ritmo de vacunación acelerada, el año que viene, termina la segunda ola o volvemos al verano y luego en el invierno volvemos a cerrar todo de vuelta. No se va a terminar la pandemia sola y al ritmo de vacunación que estamos, con la incertidumbre mundial que hay. 

Cuando se habla de una guerra de vacunas a nivel mundial, eso es así. Hay una pelea entre Estados por comprar las vacunas que producen los laboratorios privados, claro, los Estados imperialista como EE.UU, Israel e Inglaterra, que dominan el mundo, que tienen todas las vacunas que quieren, mientras los países más pobres del mundo, tenemos vacunas a cuentagotas; en África, directamente no hay vacunas. Esa es la realidad que tenemos, es una locura que los Estados se estén peleando, por cómo hacerse de vacunas cuando, por ejemplo en nuestro país tenemos una capacidad de producción de vacunas impresionante. 

- En materia educativa, ¿cómo crees que va a seguir esto? ¿Cuáles son las propuestas de ustedes, tanto desde SUTEBA como desde el Nuevo MAS?

- Nosotros, como Nuevo MAS, llevamos al sindicato un debate que tenemos que refiere a que la presencialidad escolar es muy necesaria, no se puede sustituir, el tema es que sabiendo de esta importancia, a la vez viviendo en una pandemia, necesitamos que las escuelas se pongan en condiciones se pongan en condiciones para una presencialidad segura, es decir, que se arreglen las escuelas, que se construyan más escuelas para que haya más presencialidad con distanciamiento social, que haya agua, que hayan escuelas nuevas. La pandemia no es una cosa que va a durar dos días, va a durar un tiempo, entonces, hay que adecuar un sistema educativo para la pandemia, obviamente no para estas situaciones de desborde es donde hay que cerrarlas, pero sí para la situación donde baja la ola y se puede funcionar, pero no puede funcionar como antes porque hay riesgo de contagios. Sacando algunas conclusiones, es necesario que en La Plata se duplique la cantidad de escuelas, para que esto pueda solucionar la cuestión, que de 300 pasen a ser 600, eso garantizaría muchas cosas, por ejemplo, aumentaría el empleo, arrancaría el aparato productivo para lo que significa construir 300 escuelas en la ciudad. Posibilitaría que no tengas que viajar más en colectivo los estudiantes para ir a la escuela, porque habría escuelas en todos los barrios, como era antes, que iba a la escuela del barrio, ahora creció la ciudad y no se hicieron más escuelas, todos los chicos de la periferia tienen que viajar si o si al centro para ir. Se agregaría otro beneficio educativo, que es que no tendríamos cursos de 30 o 40 estudiantes, sino de 15 o 20, eso mejora el aprendizaje, porque un docente, con 15 o 20 pibes funciona bien, pero con 30 o 40, es una locura, el pibe no aprende, el docente se vuelve loco, hay una superexplotación. Esto que estoy diciendo, lo tendríamos que haber hecho antes de la pandemia, pero ahora se vuelve necesario para no contagiarse ni morirse. Esto, que es de fondo, cualquier docente más allá de la ideología que tenga lo afirma porque vive la realidad de la escuela y ve que es necesario, por eso un tema que nosotros planteamos. 

Veo al gobernador Kicillof inaugurando y entregando patrulleros a Garro junto a Berni, y la verdad que no lo veo inaugurando escuelas, las prioridades están invertidas. Esa foto en Kicillof, la hemos visto todos los meses en toda la provincia. 

Hoy, por ejemplo, me llamó una alumna para preguntarme sobre una mesa de examen y me dice que está apurada para rendir porque quiere ser policía, a mí me gustaría que me llamen para que quieran ser docentes, pero es lógico, si ves el salario de los docentes y lo que significa trabajar en la escuela, ¿quién quiere ser docente hoy? Si hay un deterioro de la educación, responsabilidad del Estado y de todos los gobiernos anteriores. Ya es una cosa de los últimos 30 años. 

- Sos docente de colegios secundarios de barrios, tanto como de colegios que son de la universidad, ¿cómo encontraste al pibe o la piba, en estos días que has dado clases?

- Hay de todo. Pero lo primero que sentí cuando empecé a ir a las escuelas es que los pibes estaban muy contentos de volver, porque realmente fue muy duro atravesar el año pasado en el aislamiento para pibes que tienen entre 15 y 18 años. Incluso muy participativos en el aula, con muchas ganas de socializar, eso se notó muchísimo y lo pueden decir todos los docentes. Por otro lado, hubo muchos pibes muy deprimidos, que han tenido a salir a trabajar. Yo doy clases en 6° año, ya son grandes y se nota que estos pibes del barrio popular a esa edad, ya trabajan, muchas veces en algún negocio barrial. La realidad del laburo en los pibes, es muy grande. Pensemos que son pobres, la pobreza que vemos cuando uno sale del casco de la ciudad es impresionante. Eso es un factor que dificulta el estudio, porque el pibe sale de la escuela y va a trabajar todo el día hasta las 9 de la noche, y si no tiene la escuela, ese pibe no estudia en la casa. La escuela presencial, en ese sentido, genera una contención. La realidad de los barrios es muy dura, y la verdad que nunca había visto una cosa así en todos estos años.

- Para cerrar, lo que gustes decir

- Vuelvo con esta idea de que, a diferencia del año pasado, al comienzo de la pandemia, no teníamos una solución como humanidad, es decir, no teníamos la vacuna; la ciencia no había descubierto o inventado la vacuna contra el coronavirus, y solo se podía recurrir a la cuarentena para contener la enfermedad. Ahora, tenemos una solución: la ciencia, producto del avance inmenso que tiene a nivel mundial, inventó la vacuna, inventó la manera de poder encontrar una cura a la enfermedad, en el sentido de que te podés contagiar pero no corrés riesgo de muerte. En el Reino Unido, casi no hay muertes, si todo el mundo está vacunado. Existiendo la solución, el problema ya no es más científico, el problema se volvió político, es decir, quién tiene el poder de vacunar y quién no. El problema es que, en la sociedad capitalista en la que vivimos, el poder lo tienen los empresarios, entonces, el poder de la vacuna lo tienen los empresarios. Esto, nos plantea un desafío como sociedad, que es transformar y terminar con la sociedad capitalista, e ir a una sociedad donde los recursos económicos, estén en manos de los trabajadores, por ejemplo, los laboratorios, tanto como para beneficiar la vida de los trabajadores, desde la perspectiva económica, salarial y de vivienda, como para evitar morirse. Hoy el capitalismo es un obstáculo para poder garantizar la salud de la población, nos coloca, por lo tanto, un desafío que es de qué tipo de sociedad necesitamos vivir, ya no en qué sociedad podemos vivir mejor, sino en qué sociedad podemos sobrevivir. El capitalismo está mostrando de que no es un sistema social que sirva para solucionar este tipo de problemas tan graves, además, hay que saberlo, la pandemia tiene un origen producto de cómo las empresas alimenticias, están destruyendo los ecosistemas, haciendo que aparezcan virus naturales que antes el ser humano no tenía contacto, y ahora no solo que los tiene, sino que se expone de una manera mortal. Así que esto nos plantea un debate sobre la sociedad que necesitamos construir. (Cadena BA)